Preparación: Preparación del Pollo: Sazona las pechugas de pollo con sal y pimienta al gusto. Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Cocina las pechugas de pollo hasta que estén doradas por ambos lados y completamente cocidas. Retira y reserva. Preparación de la Salsa: En la misma sartén, agrega más aceite si es necesario. Sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén dorados y fragantes. Añade las espinacas y cocina hasta que se marchiten. Incorpora los tomatitos cherry y cocina por unos minutos hasta que comiencen a ablandarse. Deglasado con Caldo de Pollo: Vierte el caldo de pollo en la sartén para deglasear, raspando los fondos para aprovechar los sabores. Reduce el fuego a medio y deja que la mezcla hierva a fuego lento durante unos minutos. Añadir la Crema y Queso Parmesano: Vierte la crema espesa en la sartén y mezcla bien. Agrega el queso parmesano rallado y remueve hasta que la salsa tenga una consistencia suave. Regresar el Pollo a la Sartén: Coloca las pechugas de pollo cocidas de nuevo en la sartén, sumergiéndolas en la salsa. Cocina a fuego lento durante unos minutos para que el pollo se impregne con los sabores de la salsa. Servir: Sirve el pollo con la salsa de espinacas y tomatitos cherry por encima. Decora con hojas de albahaca fresca si lo deseas. ¡Listo! Ahora puedes disfrutar de un delicioso pollo con una salsa rica y llena de color, perfecta para acompañar con arroz, pasta o tu guarnición favorita.
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